La explotación sexual comercial de niños, niñas y adolescentes es definida por la OIT como una violación severa de los derechos humanos de las personas menores de edad, asimilable a la esclavitud, de hecho está considerada como una peor forma de trabajo infantil.
En Chile, según un estudio de la OIT y el Servicio Nacional de Menores (SENAME), existen al menos 3.719 niños, niñas y adolescentes que sufren explotación sexual comercial. De acuerdo a esta cifra es que el Sename, trabaja en proyectos de reparación dirigidos a la población infanto-adolescente explotada.
Desde el año 2001 hasta hoy se han atendido cerca de 1.500 niños (as) y adolescentes. Aproximadamente el 40% de ellos salió de este flagelo, mientras que el 60% restante sigue vinculado de manera oscilante. Este arraigo en muchos casos se explica por la asociación de la explotación sexual comercial infantil a estrategias de supervivencia propias del contexto familiar de los menores, así como a la existencia de proxenetas y clientes, -de ambos sexos y condición socio económica amplia- que lucran utilizando a los niños y niñas.
Según datos del SENAME el 56% de la población infanto-adolescente explotada está fuera del sistema escolar. Cifra muy desfavorable considerando que los establecimientos educacionales son un “factor protector fundamental en la prevención de este fenómeno, pues los profesores se convierten en referentes significativos de los niños”, señala Angélica Marín, jefa del Departamento de Protección de Derechos del Sename.
Detectar una explotación sexual comercial infantil no es fácil, sin embargo la especialista del Sename, señala algunos factores a considerar:
-Familias vulnerables socioeconómicamente, que tienden a una clara desprotección de los niños (as), con historias transgeneracionales vinculadas a la prostitución, que además, pueden estar insertas en espacios o zonas con presencia del fenómeno -puertos, zonas mineras o de nuevas construcciones que generan movimiento de trabajadores- que favorecen el comercio sexual de niños, niñas y adolescentes.
¿Cómo favorecer la inserción escolar de los niños, niñas y adolescentes que sufren explotación sexual comercial?
¿Cómo evitar esta vulneración de derechos de los niños y niñas?.
En Chile, según un estudio de la OIT y el Servicio Nacional de Menores (SENAME), existen al menos 3.719 niños, niñas y adolescentes que sufren explotación sexual comercial. De acuerdo a esta cifra es que el Sename, trabaja en proyectos de reparación dirigidos a la población infanto-adolescente explotada.
Desde el año 2001 hasta hoy se han atendido cerca de 1.500 niños (as) y adolescentes. Aproximadamente el 40% de ellos salió de este flagelo, mientras que el 60% restante sigue vinculado de manera oscilante. Este arraigo en muchos casos se explica por la asociación de la explotación sexual comercial infantil a estrategias de supervivencia propias del contexto familiar de los menores, así como a la existencia de proxenetas y clientes, -de ambos sexos y condición socio económica amplia- que lucran utilizando a los niños y niñas.
Según datos del SENAME el 56% de la población infanto-adolescente explotada está fuera del sistema escolar. Cifra muy desfavorable considerando que los establecimientos educacionales son un “factor protector fundamental en la prevención de este fenómeno, pues los profesores se convierten en referentes significativos de los niños”, señala Angélica Marín, jefa del Departamento de Protección de Derechos del Sename.
Detectar una explotación sexual comercial infantil no es fácil, sin embargo la especialista del Sename, señala algunos factores a considerar:
-Familias vulnerables socioeconómicamente, que tienden a una clara desprotección de los niños (as), con historias transgeneracionales vinculadas a la prostitución, que además, pueden estar insertas en espacios o zonas con presencia del fenómeno -puertos, zonas mineras o de nuevas construcciones que generan movimiento de trabajadores- que favorecen el comercio sexual de niños, niñas y adolescentes.
¿Cómo favorecer la inserción escolar de los niños, niñas y adolescentes que sufren explotación sexual comercial?
¿Cómo evitar esta vulneración de derechos de los niños y niñas?.
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